Junio, 2023.- Entrevista a Concepción Chamorro, Presidenta de LASEMI. A raíz de la firma del…
Otón Bellver Monzó. Farmacéutico titular Farmacia Bellver en Valencia. Sus especialidades:
Elaboración de formas orales (cápsulas) y tópicas (soluciones, pomadas, emulsiones, champus).Todas las incluidas hasta el nivel 3 (inclusive) de la legislacion vigente.
¿Desde cuándo se dedica a la formulación de medicamentos individualizados? ¿Cómo empezó?
Pues desde que acabé la carrera en 1995, tuve claro que la formulación me gustaba. Durante la residencia FIR conocí la reformulación de especialidades y al incorporarme a la farmacia comunitaria en el año 2000 comencé con el laboratorio de formulación en la farmacia. Hasta entonces, solicitábamos a terceros las elaboraciones.
¿Hasta qué punto es importante la formulación del MI en su día a día?
La farmacia Bellver no es una farmacia especializada en formulación. Esta forma parte de otros muchos servicios profesionales que ofrecemos a nuestros pacientes, pero hemos ido dando pasos estos últimos 10 años para mejorar, tanto en formación como en adecuación del laboratorio. En este sentido, asociarnos a LASEMI y hacer el curso de Experto en Formulación de Medicamentos Individualizados de la USJ ha sido fundamental. Ahora mismo, estamos acreditados en nivel 4, elaborando colirios y pomadas oftálmicas y también estamos acreditados como farmacia formuladora a terceros.
En su área geográfica, ¿en qué área se utiliza más la formulación magistral? ¿Cuál es la especialidad que más se utiliza?
Nosotros estamos en Valencia capital, y principalmente las prescripciones que recibimos son de dermatología privada. Las prescripciones provenientes del SNS son pocas, principalmente de pediatría.
¿Cuáles de las fórmulas incluidas en el sistema electrónico de recetas son las más demandadas?
Principalmente la suspensión de omeprazol para pacientes pediátricos. También adecuación de dosis de levotiroxina y de cianocobalamina en adultos, así como corticoides tópicos en excipiente adhesivo oral.
¿Cómo cree que debería ser la comunicación entre prescriptor (médico) y farmacéutico formulista?
Pues actualmente no existe. Si nos referimos al SNS debería haber un canal digital, seguro y protocolizado de comunicación, y no sólo de formulación. Además, echo de menos formaciones conjuntas, con las patologías de mayor prevalencia.
En su opinión, ¿cómo ayuda a los pacientes la formulación magistral?
La mayoría de los pacientes tienen asociado el concepto de formulación a la dermatología. Yo creo que la readecuación de dosis y formas farmacéuticas es un campo aún por desarrollar, desconocido para la mayoría de los prescriptores, pacientes y no pocos compañeros formulistas. Hemos de ser capaces de dar visibilidad a esta parte de la formulación.
¿A qué paciente cree que ha ayudado más con su trabajo de formulación?
Creo que el paciente pediátrico, por sus características especiales, es a quien más me gusta poder ayudar. A nivel particular recuerdo un paciente pediátrico hace unos años, que había nacido sin que se le hubiese cerrado de forma correcta el ductus arteriosus. Su pediatra le prescribió una solución de captoprilo y los padres no encontraban una farmacia que lo elaborara. Vino a nosotros, los elaboramos y durante dos años llevamos el seguimiento del paciente. Ver como el niño crecía bien y el enorme agradecimiento de los padres ha sido una de mis experiencias profesionales más satisfactorias.
¿Cómo ve el futuro de la FM?
Pues como el del resto de la farmacia comunitaria. Preocupado y al mismo tiempo ilusionado. Los farmacéuticos comunitarios debemos dar el paso de demostrar resultados en salud. Que nuestros pacientes mejoran tras nuestras intervenciones. Que somos eficientes. Y lo mismo que sirve para el medicamento comercializado ha de servir para el elaborado de forma individualizada.
A nivel de formulación el reto es mantenerla, mejorarla, darla a conocer entre prescriptores, pacientes y compañeros que no formulan. Mostrar su potencial. La labor de LASEMI es indispensable en este aspecto. No nos cansemos nunca de remar.